En un caso tremendo también fue condenada su madre que participaba de las violaciones.
Un médico patólogo y su madre de 79 años fueron condenados hoy a penas de 12 y 11 años de prisión, y quedaron inmediatamente detenidos en los tribunales de San Isidro, por abusar sexualmente y en forma reiterada de dos nenes que son sus respectivos hijos y nietos, cuando los chicos tenía 6 y 5 años, informaron fuentes judiciales.
El fallo, dado a conocer este mediodía, es del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 3 de San Isidro, integrado por los jueces Verónica Di Tomasso, Raúl Luchelli Ramos y Marcelo García Helguera.
Las identidades de los condenados se mantienen en reserva para preservar a los niños que fueron víctimas, pero fuentes judiciales indicaron que los condenados son un médico patólogo de 44 años que vive en Mar del Plata y su madre de 79 que tiene domicilio en Las Lomas de San Isidro.
El TOC 3 dio por acreditada la acusación planteada por el fiscal de San Isidro que tuvo a cargo no sólo el juicio sino también la instrucción de la causa, Matías López Vidal, al considerar a ambos como coautores del delito de “abuso sexual con acceso carnal y gravemente ultrajante, agravado por el vínculo”.
Las penas fueron similares a los 14 años de cárcel que ayer López Vidal había solicitado para el hombre y los 12 para la mujer.
Los jueces Di Tomasso, Luchelli Ramos y García Helguera también avalaron otro pedido del fiscal y ordenaron la inmediata detención de los condenados, quienes fueron esposados en la sala de audiencias que el TOC 3 tiene en el segundo piso del edificio judicial de la calle Ituzaingó 340 de San Isidro.
Según la denuncia que realizó la madre de los chicos -quien en ese momento ya estaba separada del padre de sus hijos-, los hechos por los que madre e hijo fueron condenados hoy, se iniciaron en 2009, cuando la nena mayor tenía 6 años y su hermano 5, y se extendieron hasta 2011.
El médico ya vivía en Mar del Plata pero cuando viajaba y venía a visitar a su hijos se instalaba en la casa de su madre y abuela de los nenes, en Las Lomas de San Isidro.
Según lo que planteó el fiscal en su acusación, en esa casa los chicos sufrían los abusos, ya que los obligaban a turnarse para ir desnudos a la habitación de su padre y a la de su abuela, según lo que pudieron contar las víctimas a los psicólogos en cámara Gesell.
En el juicio también se reveló que otros abusos ocurrían cuando el padre llevaba al cine a los dos nenes.
La denuncia fue realizada por la madre y los representantes legales del colegio al que asisten, cuando por problemas de conducta en la escuela la nena fue al psicólogo y allí contó lo que pasaba.
En el debate declararon el médico pediatra de los niños, una ginecóloga, la psicóloga que los trata, las psicólogas de la Asesoría Pericial y el Centro de Atención a la Víctima de la Fiscalía General de San Isidro, peritos de parte, docentes de la escuela y la madre denunciante.
En el juicio, la madre de los chicos participó como particular damnificada y estuvo representada por la abogada Estela González Espul, mientras que el defensor de los imputados fue el letrado Hugo Claudio Moauro, quien había solicitado sus absoluciones.